#02 - LA MISMA MIERDA / THE SAME SHIT

I have always said that a good gift at the right time, is perfect for morale, relationship and even fuck, it makes you wish to see what the fuck they have given you. You open it; you remove the paper with your heart buzzing in your ears and... with the careful look of those around you see that you have given a shit stuck on a stick or worse ... you already have that same gift .

Well, something similar happens with the shit of the cats. Making clear to him all that roll of the illusion, the nervousness and even with the desire to open the package. Here the package is also wrapped in dirt. Well in case you have land, in my case are opaline pebbles that barely make dust and are multicolored. The smell will eat you the same, it does not matter shit (never better said) that the cat is forced to hide it. But what the hell! It smells alike! Every time I see him in his box, I feel like coming closer and telling him: do not kill yourself as long as you hide it, and it's going to touch me, so stop and stop playing with my balls .

But if he is happy... and it makes him illusion... and gets stuck in moving and moving, and moving... Who am I to tell him not to do it? He looks at me with that face while the shit goes out of his ass to go to the land, turns around and work to hide it.

At the end each day you end up having a fucking gift, without the next disappointment that you expect your cat (at least they are clean, except when they move the land so much, that the shit ends out of the drawer) for one day he picks it up.

You get your hopes up. The heart is accelerating, and when you open that gift... run the cat because you just want to kill it.

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Siempre he dicho que un buen regalo en el momento justo, es perfecto para la moral, la relación y hasta joder, te hace ilusión ver qué coño te han regalado. Lo abres, quitas el papel con el corazón zumbando en tus oídos y.... con la atenta mirada de los que están a tu alrededor ves que te han regalado una mierda pinchada en un palo o peor... ya tienes ese mismo regalo.

Pues algo parecido pasa con la mierda de los gatos. Quitándole claro todo ese rollo de la ilusión, el nerviosismo y hasta incluso con las ganas de abrir el paquete. Aquí el paquete también está envuelto en tierra. Bueno en el caso que tengáis tierra, en mi caso son piedrecitas opalinas que apenas hacen polvo y que son de multicolor. El olor te lo comes igual, no importa una mierda (nunca mejor dicho) que el gato se esmere en esconderla. ¡Pero qué más da! ¡Qué huele igual! Cada vez que lo veo en su caja de tierra, me dan ganas de acercarme y decirle: no te mates por más que lo escondas huele, y encima me va a tocar quitarlo a mí, así que para y sal y deja de tocar los huevos. 

Pero si él es feliz...y le hace ilusión.... y se emperra en mover y mover, y mover.... ¿quién soy yo para decirle que no lo haga? Me mira con esa carita mientras el mojón sale de su culo para ir a la tierra, se da la vuelta y a trabajar para esconderlo.

Al final cada día acabas teniendo un regalo de mierda, sin la siguiente desilusión de que esperas que tu gato (al menos son limpios, excepto cuando mueven tanto la tierra, que la mierda acaba saliendo del cajón) por un día lo recoja él y arrime el hombro. 

Te haces ilusiones. El corazón se te acelera, y cuando abres ese regalo... que corra el gato porque solo tienes ganas de matarlo.